Hace hoy exactamente un año, fuimos convocados a las urnas para elegir a los representantes municipales de nuestros respectivos ayuntamientos. Era domingo y no martes, como hoy, y desde primeras horas de la mañana comenzaba a anunciarse lo que al final de la jornada sería noticia: la alta abstención que la población había decidido para estas elecciones, que quedó en nada menos que 11.037 personas que no acudieron a los colegios electorales, de un total de 19.722 con derecho a voto. También fue noticia que el partido más votado fuera el Popular, con 8.835; detrás, el PSOE con 7.598; IU-CA-LV, 1.575; Partido Andalucista, 1.129, y, finalmente, el PIDAN, que se presentaba por primera vez, con 329 votos. Los lemas con los que las diferentes formaciones acudieron a esta cita aún están en nuestra memoria: los populares con "Ilusión por Andújar", aunque al final la que más prosperó fue la de "vota a Jesús". Por su parte, los socialistas aseguraban a la ciudadanía que "Juntos haremos más Andújar"; IU-CA-LV, "Contigo es posible"; los andalucistas, "Andújar lo primero", y, por último, el PIDAN, "Por Andújar".
Cuando comparamos los números, vemos que el Partido Popular, como ya hemos dicho, fue el que más votos acumuló, obteniendo 1.684 más que en la cita electoral anterior, todo un éxito. Los socialistas perdieron 287, 63 más consiguió IU y 1.726 menos los andalucistas. De lo que haya servido hasta ahora estos resultados, ustedes más que nosotros podrán valorar lo acontecido y dedicarse el éxito o el fracaso, que de todo parece haber en esta onírica viña en la que vivimos todas y todos. Naturalmente, el hecho de que el partido ganador fuera el mismo que había sustentado la Alcaldía los cuatro años anteriores, aunque apoyado por el Partido Andalucista, que fue el que realmente pagó los excesos de sus compañeros de pacto, fue determinante para el resultado final, ya que durante este período vivimos en permanente campaña electoral, y de este tipo de situaciones siempre hay alguien que obtiene beneficios.
Ocurre, sin embargo, que los años de la primera legislatura en manos de andalucistas y populares discurrió con la suerte añadida de que el anterior gobierno municipal, pactado entre IU y los socialistas, se dejó por inaugurar importantes consecuciones que le supusieron un gran esfuerzo a todos los niveles, y que los recién llegados supieron aprovechar sin ningún tipo de rubor el trabajo desarrollado por los anteriores gobernantes. De hecho, una vez puestos en servicio y a disposición de la ciudadanía todas estas consecuciones, poco podemos añadir al expediente de quienes ostentan el poder político en nuestra ciudad desde hace ahora cinco años. Cierto que hicieron mucho ruido y que vimos folletos en la calle anunciando todo tipo de suerte para la ciudad; sin ir más lejos, recuerden que, gracias al esfuerzo de estos políticos, la ciudad contaba ya con una casa del deporte en las antiguas instalaciones de Abanderado, de la que nos hicieron llegar fotos en las que se podían leer claramente "Casa del Deporte" en el frontal de estas oficinas. Tampoco faltó la frase "conseguido" para la plaza de toros y los jardines de De Val, aunque la realidad es bien diferente y todo sigue como estaba, a la espera de un acuerdo consensuado y no interesado, porque, como dijimos en su momento, estos convenios urbanísticos no tenían otro fin que la de obtener dinero fácil.
En cuanto a lo que es posible que en su día sea lo que tanto nos está costando, y eso que aún no se ha hecho el gran trabajo que necesitan estos miles de metros cuadrados, es decir, el parque tecnológico que se ubicará en los Llanos del Sotillo, poco podemos añadir que no conozcan ustedes, ya que la inversión que se ha hecho en parafernalia, en copas de vino español y convites de todos los colores; en la colocación de las banderolas anunciando la buena nueva; en cintas de vídeo, fotos de prensa y artículos; en primeras, segundas y terceras piedras; en llevar y traer las retroexcavadoras para el día de la foto oficial y en las diferentes visitas controladas que han efectuado para ver cómo, por ejemplo, cambiaban de sitio las torres que transportan la electricidad, ha sido sencillamente inmensa, insoportable e inútil. De hecho, si alguien puede a estas alturas justificar la pérdida de nada menos que cuatro años en idas y venidas, y que el recinto aún esté hecho un erial , que lo diga y es posible que tengamos que reconocer nuestro error. Mientras tanto, mantendremos nuestra disconformidad con el fondo y la forma en cómo han dirigido el gran sueño de Andújar.