Ahora que nos encontramos ya en las puertas del verano, aprovechando el buen tiempo, nos marchamos a conocer la localidad de Torres de Albanchez.
En el norte de la Sierra de Segura, recostada en una de las laderas que cobijan el valle por donde discurren los rios Guadalimar y Onsares, encontrarán el viajero y la viajera la villa de Torres de Albanchez.
Esta población se encuentra rodeada de elevaciones montañosas de la Sierra de Segura, mezclándose los pinares con especies como el encinar, el olivar, el quejigar e, incluso, con terrenos de labrantíos y huertas. La fauna aprovecha esta variedad de ecosistemas y viven aquí ardillas, pinzones, verderones, águilas, chamarines, petirrojos y numerosas variedades más.
Habitualmente, les recomendamos que inicien su recorrido visitando las aldeas que completan la localidad. Bueno, pues hoy no iba a ser menos, ya que nos ofrecen una visión diferente de la realidad estresante que vivimos. Por ello, hoy les sugerimos que conozcan El Moracho, La Fuente de la Carrasca, Los Maridos, La Tala y la Hoya. Además, a su alrededor disfrutarán de imponentes vistas serranas.
Los amantes de la arqueología encontrarán también restos de su pasado íbero y, en la cueva de los Caballos, podrán acercarse al Neolítico.
Podrán conocer la populosa romería de la virgen del Campo, que se celebra en su ermita en el mes de mayo, repitiéndose tales festejos en agosto y septiembre. Como es tradición en muchos lugares de la geografía española, también aquí se apareció la virgen pidiendo la construción de una ermita.
Tendremos además la oportunidad de acompañar a los/as habitantes de la villa en sus fiestas de la Candelaria, en febrero y en abril, para salir al campo en el día de san Marcos.
Indicaremos a nuestros/as oyentes que el primitivo emplazamiento de Torres de Albanchez no coincide con el actual, sino que se localiza en un montículo cercano defendido por el castillo de la Yedra, hoy ya derruido, pero del que se conservan algunos restos.
Y una vez dentro del pueblo recorreremos sus calles hasta llegar al centro, donde nos vamos a encontrar con una torre del homenaje cuadrada construida con mampostería careada. Más adelante conoceremos la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Presentación. El coro está situado en alto, protegido por una baranda de madera labrada.
Continuando con nuestro paseo, llegaremos a la Casa del Mayorazgo, mansión señorial de interés cultural.
Antes de abandonar Torres de Albanchez deberán el/la caminante disfrutar de una peculiar cocina serrana que tiene al aceite de oliva como su principal ingrediente. Además, su peculiar cocina llama “ajo” a todo guiso en el que, para elaborarlo, se trituren o machaquen sus ingredientes hasta que adquieran la textura de un puré, independientemente de que lleve ajo o no. Así habremos de encontarnos con el ajopringue, el ajoatao y el ajoharina. Otras viandas que nos ofrece la villa son el lomo en orza, las migas con torreznos y chorizos, el cordero en ajillo, el potaje de garbanzos y, de postre, los roscos fritos, las flores y las gachas dulces con tostones. Muy completo, como pueden ver.
Hasta aquí nos ha conducido nuestra ruta de este viernes. Les esperamos la próxima semana para acercarnos y conocer el único pueblo de la provincia de Jaén que aún no hemos visitado: Génave. Hasta entonces, que pasen un buen fin de semana.
