viernes, 30 de marzo de 2012

VACACIONES DE SEMANA SANTA

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Por fin llegan unos días de descanso. Comienzan las vacaciones de semana santa y, aunque no compartidas por la totalidad de los trabajadores, lo cierto es que echarán a la carretera a millones de usuarios en busca de algo de paz y tranquilidad para el espíritu y el cuerpo. Es verdad que los combustibles, su precio, frenarán el habitual éxodo al que asistimos todos los años, pero tampoco será determinante en la mayoría de los casos. Por otra parte, tampoco se trata de desplazamientos que demanden dos o tres paradas en las estaciones de servicio y sí de distancias cortas que nos permiten el acceso a desfiles procesionales de gran importancia y envergadura. Elijan lo que elijan, no obstante, sepan que deberán compartir espacio con otros conductores y que tendrán las mismas pretensiones que ustedes, es decir, llegar cuanto antes a su destino. Esto quiere decir que fácil no se lo van a poner, ya que lo de llegar antes que los demás parece una ineludible obligación que debemos cumplir a rajatabla y no tenemos por costumbre perdonar a quienes intentan imponer sus formas.

Aunque no creemos necesario echar mano del manual del buen conductor, sí convendría que de modo particular cada uno de nosotros aportara lo mejor de sí mismo mientras ejerzamos de conductores, porque estamos convencidos que servirá para que el resto no nos observe como contrincantes o enemigos a los que batir. Por si alguien aún no se lo ha dicho, sepan que la totalidad de los usuarios nos ponemos al volante de nuestro vehículo con infinidad de problemas sin solventar y con el futuro sujeto con alfileres, y, claro, cuando una persona emprende el camino tan presionado, tan dedicado a menesteres que no son precisamente los que les exige la conducción, podemos esperar cualquier cosa. Confirmando lo que les decimos, el año pasado se registraron nada menos que quinientos cincuenta fallecidos en la carretera debido a los despistes o distracciones de los conductores, y no siempre porque usaban en ese momento el teléfono o manejaban el GPS.

La Dirección General de Tráfico, por su parte, tiene previsto poner en la carretera a la totalidad de los agentes y vehículos disponibles con el objetivo de controlar la circulación, evitar los excesos y contribuir a la seguridad de todas y todos. No obstante, de poco servirá su presencia si de nuestra parte no aportamos serenidad y rigurosidad al camino, que por cierto se consigue sin esfuerzo puesto que se trata estrictamente de hacer las cosas bien. En cuanto al asunto de las denuncias primero y sanciones después, los conductores que suelen caer en su propia trampa son aquellos que no atienden limitaciones porque aseguran que Tráfico se extralimita en sus funciones y que les cercena su libertad. Nosotros entendemos que mientras dilucidan este planteamiento y encuentran una salida airosa, lo que debían aceptar es lo establecido y no menospreciar de forma tan peligrosa su seguridad. Y la de todos, porque demostrado está que la velocidad excesiva genera por sí misma peligro y casi siempre acaba siendo protagonista de un accidente.

Si nos planteamos con solvencia intelectual el viaje, veremos que la primera exigencia es llegar y luego sanos y salvos. Inmediatamente después, que nos halla salido más económico que las anteriores, porque recordemos que los precios de los carburantes se han incorporado al presupuesto con fuerza y están dispuestos a amargarnos la fiesta. Un vehículo que circule entre ciento diez y ciento quince kilómetros por hora consume mucho menos que cuando lo hace a ciento cuarenta, además de que el desgaste de los neumáticos es mayor y sus componentes también sufren un especial deterioro. A todo esto, tenga a mano la documentación al completo y evite las fotocopias que no hayan sido compulsadas. Por supuesto, un día antes del viaje, compruebe los neumáticos y su presión, revise los niveles de los líquidos de embrague y frenos, el aceite del motor y, si tiene que añadir líquido anticongelante, hágalo. Buen viaje y felices vacaciones. Nosotros volveremos el lunes día 9.