martes, 5 de junio de 2012

II PLAN ESTRATÉGICO DE LA PROVINCIA DE JAÉN

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Hace unos días conocimos, a través del boletín informativo editado para la ocasión, la evolución del II Plan Estratégico de la provincia de Jaén, destacando por encima de cualquier otro contenido técnico, la presentación que se hizo el pasado mes de mayo en la capital de la provincia y en el que estuvieron presentes la flor y nata de la sociedad jienense. De este boletín extraemos algunas consideraciones y datos que creemos de gran significado para el resto del mundo, especialmente de quienes andan expectantes a la espera de que alguien sea capaz de poner en marcha la máquina laboral que tanto demanda y necesita nuestra provincia. Por ejemplo, y por ir calentando el ambiente, sepan que en nuestra provincia, entre 2009 y 2010, han desaparecido 3.049 industrias y han cerrado unos 1.500 comercios, con el sector de la construcción en claro retroceso y con una caída del crédito muy generalizada. Con este panorama como exponente clave de la realidad de una provincia como la nuestra, con el monocultivo del olivo como única referencia económica y que precisamente no está en su mejor momento, se entiende que hay que ir mucho más lejos de estudios del tipo que les comentamos y desde luego dejarse de discursos por sí mismo inviables.

Naturalmente, los datos de industrias y comercios cerrados han permitido y justificado el frenazo registrado en el apartado de las iniciativas empresariales, las demandas de bienes de consumo y el incremento de forma importante del desempleo. Por otra parte, si le sumamos la bajada del precio del aceite de oliva, obtenemos una radiografía económica de nuestra provincia que no puede dejarnos indiferentes y que debe servirnos para afrontar con más decisión los cambios estratégicos que necesitamos. Aunque todos sabemos que la salida de la crisis depende en gran parte de las macro políticas europeas y nacionales, la actual situación nos debe animar para cambiar y trabajar de forma conjunta desde las micro políticas que, por ejemplo, encontramos en el II Plan Estratégico de la provincia. Otra cosa es que seamos capaces de ni siquiera iniciar el camino, porque de lo que sabemos más que de sobra es que a lo largo de los años a Jaén nunca le han faltado grandes proyectos por realizar, pero que ninguno ha dado los resultados que a bombo y platillo se anunciaron.

Por el momento, este II Plan ha demandado la aportación de ocho comisiones de estrategia en las que han participado más de quinientos colaboradores que han tenido la tarea común de analizar los hechos y retos a los que se enfrenta la provincia, plantear objetivos, priorizar proyectos y actuaciones y establecer indicadores de evaluación para valorar el grado de ejecución del plan y su impacto sobre la realidad de Jaén de aquí a 2020, que es el período que se ha elegido para el desarrollo completo del citado plan. Evidentemente, un trabajo profundo, arduo y completo del que por el momento solo conocemos sus inicios y poco más. Cierto que se ha estabilizado el trabajo, que a partir de ahora comenzarán a tomarse decisiones evaluables y que aseguren será imparable el proceso del desarrollo de todos los compromisos adquiridos, pero siempre nos quedará la duda de si seremos o no capaces de alcanzar al completo alguno de los retos conocidos.

Por la escasa experiencia que tenemos de este tipo de planes provinciales, sabemos que es imprescindible el aunar capacidad técnica, voluntad política y participación ciudadana. La interacción sistémica entre las estrategias, los proyectos y las acciones es la que puede cambiar la dinámica socioeconómica de una provincia. Conocer los problemas y saber cómo solventarlos es el primer paso para actuar con inteligencia resolutiva de forma personal, empresarial, institucional, social y colectiva.