lunes, 1 de diciembre de 2014

DÍA DEL STOCK: OBJETIVO CUMPLIDO

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Incluso la meteorología se alió con los organizadores del día del stock y éste pudo desarrollarse de acuerdo con la programación y las previsiones que los técnicos de la Cámara de Comercio e Industria y el Centro Comercial Abierto habían previsto. El resultado, la caja final, aunque nos adelantemos a la valoración que deberán hacer quienes han avalado el evento, entendemos que ha sido un éxito. Como en otras ediciones, sobre el propio comerciante recayó la responsabilidad de atraer a los clientes y en la casi totalidad de los casos cubrieron sus propias expectativas. Y es que tal y como están las compras, las exigencias concretas de los potenciales clientes marcan claramente las diferencias y obligan al comerciante a plantearse nuevos retos y no solo en precios, sino en la originalidad de los artículos y la garantía. Convencerse de que los tiempos han cambiado, que a los compradores debemos atraerlos con algo más que mercancía y precio, que tenemos demasiado cerca a la competencia, no solo nos servirá para sentar las bases de nuestro propio negocio, sino para asegurarnos la viabilidad de la inversión. Lo de abrir un local más o menos bonito, llenar el escaparate de mercancía y unos precios ajustados, y esperar a que se venda sola es un error de cálculo que no pocos han terminado pagando.

Nuestra ciudad aún cuenta con un sello diferenciador para muchos vecinos y vecinas de la comarca, que nos sigue observando como un gran almacén en el que encontrarán de todo y en condiciones económicas óptimas. Y en esto, que para algunos puede ser un detalle sin mayor trascendencia, puede estar el salvavidas al que agarrarnos para llegar a la orilla en las mejores condiciones y reanudar el proyecto las veces que sea necesario. De hecho, compradores de todo tipo aseguran que Andújar posee un comercio de primera, con grandes tiendas en donde encontrar cualquier mercancía y con empresarios que poseen ideas innovadoras que, una vez desarrolladas, aumentan las posibilidades de sus negocios. Si a esto le añadimos que nuestra situación geográfica es envidiada, que somos la capital de la campiña Norte y que la proximidad de ciudades de importante densidad demográfica es escasa en kilómetros, lo que necesitamos en realidad es el apoyo de quienes, entre sus obligaciones, tienen la de ofrecer a quienes vienen a visitarnos posibilidades para que el acceso y la estancia en la cuidad sean cómodos y rápidos.


Trabajar por conseguir una ciudad más permeable, más accesible a personas y vehículos, debía ser el objetivo prioritario  de las instituciones y de la ciudadanía y al que dedicarnos convencidos de que también este apartado es tenido en cuenta por los potenciales compradores que nos eligen para realizar sus compras. Nuestra ciudad, y muy especialmente nuestro comercio, necesitan de la implicación inmediata de las Administraciones con responsabilidad en su mejora para que inviertan en realizaciones públicas que la mejoren por dentro y por fuera. Y no se trata de obras faraónicas ni de inversiones millonarias, aunque sí que es imprescindible poner la imaginación de los técnicos al servicio de un conjunto que, por su monumentalidad, su casco antiguo, sus características que tanto la definen, demanda intervenciones que activen sus auténticas posibilidades. Por el momento, la inversión particular, la del empresario, va por muy por delante de la pública y cuanto antes se rompa esa tendencia mejor para todos.