viernes, 1 de abril de 2016

RESULTADOS DE LA OPERACIÓN SEMANA SANTA

Imprimir

El operativo especial controlado por la Dirección General de Tráfico en Semana Santa ha finalizado con nada menos que cuarenta y una víctimas mortales en nuestras carreteras, siete más que las registradas durante el mismo período del año pasado. En realidad, si no hubiera sido por el desgraciado accidente ocurrido en Tarragona, precisamente el más importante de todos, en el que un autobús se vio implicado en una salida de vía con el resultado de trece chicas estudiantes de Erasmus fallecidas, las cifras hubieran sido bien distintas, pero no ha podido ser así. Por otra parte, si anotamos que desde el inicio de la operación salida hasta su cierre se contabilizaron más de catorce millones de desplamientos de largo recorrido, quizá nos ayude a entender las consecuencias que se han derivado de tanto movimiento automovilístico, y más si conocemos cómo nos las gastamos cuando ejercemos de conductores. Dicho todo esto, que sepan ustedes que acumulamos tres años de aumento progresivo del número de vehículos en la carretera, detalle aprovechado por nuestros gobernantes para recordarnos, sobre todo, que la economía mejora y que, por tanto, es el momento de renovar nuestro vehículo.

Tráfico nos informa de que a lo largo de este tiempo, en la suma total controlada, se ha contabilizado un número menor de accidentes, aunque parezca todo lo contrario. Por ejemplo, sabemos que esta semana de idas y venidas se produjeron veintiocho accidentes mortales, mientras que el año pasado fueron treinta y tres. Con todo, como ya sabemos, el número de muertos ha sido mayor. Por comunidades autónomas, Cataluña, Castilla y León, Extremadura y Andalucía han sido las que han registrado accidentes mortales. En contra, ninguno en Aragón, Asturias, Cantabria, Navarra, Madrid y La Rioja. Con respecto a las particularidades de la accidentalidad registrada, si exceptuamos los de Cataluña, Tráfico nos dice que diecisiete personas fallecieron en accidentes ocurridos en vías convencionales frente a las seis que se registraron en accidentes ocurridos en autovías o autopistas. Por otra parte, las salida de vía siguen siendo el tipo de accidentes más frecuentes, con once fallecidos en esta Semana Santa. Cuatro personas lo fueron en colisiones frontales y otras cinco lo fueron por atropellos. Destacan que, usando vehículos turismo, diez personas fueron las fallecidas, cinco en motocicleta, cinco peatones, uno en bicicleta y uno en camión. Afortunadamente, los ciclomotores en esta ocasión no han registrado accidentes de importancia.

A lo largo de la Semana Santa, siguiendo con el análisis que nos ha hecho llegar Tráfico, el tramo horario en el que más accidentes mortales se han contabilizado fue entre las ocho de la tarde y las doce de la noche, con el resultado de nueve fallecidos, seguido del tramo de siete de la mañana a dos de la tarde, horario en el que murieron seis personas. Por grupo de edad, entre los 25 y los 34 años encontramos el de mayor número de fallecidos, seguidos por los de 35 a 44 años y los de 45 a 54, con cinco fallecidos, respectivamente. Por último, la Dirección General de Tráfico destaca que, de los diez fallecidos en turismos, tres de ellos no utilizaban cinturón de seguridad en el momento del accidente, y tampoco hacía uso del casco uno de los cinco motoristas muertos, así como el único fallecido que se desplazaba en bicicleta.

Queda claro, creemos, que no siempre interpretamos con la rigurosidad que nos conviene las normas y las pautas del tráfico que están más que remarcadas y que son de sobra conocidas. El motorista porque no hacía uso del casco, lo mismo que el ciclista. Los del turismo porque decidieron que el cinturón no era necesario. Los demás, despistes, excesos...