Este
fin de semana Andújar ha vivido impregnada en aceite de oliva virgen
extra: catas, conferencias, pregones, parlamentos de ilustres
personalidades ligadas al oro líquido y a la política, almazaras de
toda la provincia desplazadas para la ocasión, desfiles de moda,
comercios abiertos mañana y tarde, negocios de hostelería repletos
y gente, mucha gente paseando la ciudad. Entre los profesionales del
marqueting, este tipo de encuentros representa una enorme posibilidad
de negocio que se debe aprovechar con fines eminentemente económicos.
Aunque las consecuencias que se deriven de la presentación y
celebración de nuestro primer aceite de oliva virgen extra es algo
que no alcanzamos a valorar como sin duda merece, sí que hemos
aprendido de este encuentro en primera fase que al menos ha servido
para situar a nuestra ciudad en las portadas de muchos periódicos de
tirada nacional y en los informativos de las cadenas de televisión.
La Diputación y el Ayuntamiento, arropados ambos por el empresariado
del mundo olivarero y la aportación que han realizado colectivos de
todo tipo, han clausurado con éxito el evento que quizá más nos
signifique en el exterior, ya que el aceite de oliva, aunque quizá
no tanto como en otras ciudades de la provincia, es nuestro producto
estrella y en el que se trabaja permanentemente en busca de la
excelencia.
Afortunadamente
para el olivar, los tiempos en los que los precios los marcaban las
grandes superficies y los intermediarios han dejado paso a unas
políticas comerciales más controladas por las organizaciones
agrarias y el propio Estado, que vigilan, con la ayuda de los
tribunales de justicia, los abusos que algunas grandes superficies
hacen con respecto al aceite de oliva y su precio, al que usan como
descarado reclamo para atraer a sus clientes incumpliendo así las
leyes más elementales del mercado. Lo evidente es que el aceite de
oliva virgen extra que llega a los establecimientos,
independientemente de su procedencia, ha conseguido una estabilidad
de precios desconocida y que está siendo la que finalmente evite que
muchas explotaciones olivareras decidan abandonar el cultivo y
arrancar sus árboles a cambio de nuevos cultivos que anuncian más
rentables y que demandan menos cuidados. En nuestro caso, con sesenta
y seis millones de olivos censados y la distinción de ser la primera
productora mundial de aceite, el camino pasa por recorrer
inevitablemente los difíciles vericuetos que imponen los mercados,
pero al mismo tiempo el trabajo que se ha hecho para realzar el
producto, para conocer más y mejor sus propiedades nutritivas,
especialmente el de las universidades de medio mundo, nos están
abriendo mercados que hace unos años parecían sencillamente
inalcanzables.
La
Diputación y nuestro Ayuntamiento acordaron la celebración en
nuestra ciudad del primer aceite de esta campaña y estamos
convencidos de que el éxito la ha acompañado a lo largo de los dos
días: por asistencia de público, porque las almazaras que han
expuesto sus aceites han sido más que en la pasada edición, porque
se ha vendido toda la mercancía y porque ha estado apoyada por
personalidades como Ramón Roteta, que lo hizo en nombre de Cocineros
Europeos, y que nos dio una lección magistral de cómo interpretar
un encuentro como el vivido este fin de semana; Roberto Brasero, el
hombre del tiempo en Antena 3 y pregonero de la edición de este año,
y por supuesto representaciones de primer orden de la Diputación
provincial, el Ayuntamiento y la Cámara de Comercio. Por otra parte,
el hecho de que el comercio se pusiera de acuerdo en la convocatoria
de un programa paralelo repleto de moda el sábado por la mañana y
la tarde, supuso el remate final de unos días de gran contenido del
que estamos seguros Andújar se ha beneficiado y seguirá haciéndolo
al menos hasta la edición del año próximo.