Efectivamente, como dijo en la
presentación del programa a desarrollar por el Ayuntamiento, la Diputación y la
Junta de Andalucía el alcalde de la ciudad, señor Huertas, llevar agua al
poblado del santuario viene de lejos, concretamente con veinticinco años de
retraso, una historia repleta de inconvenientes, rechazos, concesiones
hipócritas y mucho trabajo para los medios de comunicación, que la hemos
seguido allá donde intuíamos que nos hablarían de su realización. Por tanto,
sumados los datos, analizados con perspectiva, lo del agua en el cerro de la
Cabeza ha sido una quimera hasta el pasado martes, que llegó custodiada nada
menos que por el presidente de la Diputación provincial, el delegado de Medio
Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía y, como hemos
dicho, nuestro alcalde. Naturalmente, a la puesta de largo del inicio de los
trabajos que acabarán definitivamente en el año 2020, acudieron los interesados
en conocer con detalle el proyecto y entre ellos vimos representación de la cofradía
y de los trinitarios, entre otros, pero sobre todo de romeros y peregrinos,
residentes y propietarios de albergues y viviendas, ávidos de noticias que les
permitan un futuro consolidado y una situación más llevadera y cómoda en sus
estancias o visitas al poblado y basílica-santuario.
Dicho todo esto, lo que
debemos valorar es que, por fin, dotar de agua al santuario y sus alrededores
ha comenzado la cuenta atrás y con fecha de finalización, lo que, incluso
aceptando que se produzca algún retraso por razones que puedan surgir a lo
largo del desarrollo de los trabajos, no solo calma los ánimos de los que hasta
ahora han venido soportando la falta del líquido elemento, sino que se
revaloriza la totalidad del poblado de forma significativa. Evidentemente, no
es lo mismo tener una vivienda en un lugar tan hermoso como emblemático con
agua que sin ella, y en esta diferencia es posible que no sean pocos los que
encuentren fórmulas de hacer negocio. En cuanto a lo que les decíamos con
respecto a la importancia del apoyo que ha conseguido nuestro Ayuntamiento en
la consecución de proyecto tan importante como demandado, luego de años y años
de descalabros políticos, de frustraciones y de pérdidas de credibilidad de los
diferentes gobiernos municipales que trabajaron en ello, asistir a un acto de
tanto contenido y con el respaldo de la Diputación y la Junta, la verdad es que
es para celebrarlo y compartirlo.